Alumni lanza su afterwork temático en noviembre, un hábito que practican 10 millones de españoles
Tras nuestra fiesta de reencuentro en La Noche de los Ex y como os prometimos “hay vida más allá de la Rambleta”. Desde la Cátedra de Cultura Empresarial vamos a ofreceros todas las herramientas a los exalumnos de la CCE para que se consolide el magnífico grupo que logramos reunir en nuestra puesta de largo. Animamos al centenar largo de Alumni de la Cátedra que lograron reunirse a mantener viva esta llama mediante distintas iniciativas encaminadas a generar contacto, negocio y beneficio. Pero sobre todo, a desarrollar una asociación de exalumnos viva, dinámica y que organice actividades que tengan valor añadido. La primera de ellas –que figura dentro del plan de Alumni de la Cátedra- será la puesta en marcha de nuestro “afterwork temático”.
Una idea de nuestro consejo asesor
Tanto Lorena Jericó, presidenta de Alumni como Alejandro Creus, vicepresidente, han lanzado la iniciativa de implementar esta primera idea y nuestro primer afterwork temático tendrá lugar el próximo 5 de noviembre. El lugar y la hora todavía están por determinar pero compartiremos muy pronto esta información a través de los medios habituales de la Cátedra de Cultura Empresarial: web, redes sociales, newsletter y un correo masivo. Se podría decir que el fenómeno afterwork ha desembarcado en España por la puerta grande. Si miles de personas cultivan esta interesante práctica, ¿por qué no lo probamos los Alumni de la Cátedra de Cultura Empresarial?
Práctica extendida entre profesionales
Los afterwork se han incorporado a las rutinas sociales de los españoles de una forma rapidísima. Hoy en día en España ya son 10.625.000 personas quienes, al menos una vez al año, dedican un momento a socializarse con sus compañeros tras la jornada laboral. Y la cifra no es pequeña, ya que supone más de la mitad del total de población ocupada en nuestro país (17.865.000 trabajadores, según la Encuesta de Población Activa del segundo trimestre de 2015). Pese a la crisis o -quizás- gracias a ella muchos ciudadanos buscan cada vez más un momento de relax en el que olvidar los problemas y disfrutar del tiempo libre. La tendencia, a medio camino del conocido apperitivo italiano, se ha trasladado a los días inter-semanales y del círculo de amistades de toda la vida al de los compañeros de trabajo. Ahora, además, se convierte en una nueva herramienta para ampliar contactos, profundizar en la colaboración empresarial o de negocios, o simplemente, tomar contacto.
Hacer negocios fuera del despacho
Se trata de una nueva manera de socializarse que, según los expertos en coaching relacional, fortalece las relaciones entre colegas de profesión o sirve para que empresarios y clientes se conozcan de una forma distendida, lejos de las comidas de negocios y los fríos despachos, en un local de moda de la ciudad. La tendencia, que toma el relevo de la caña de toda la vida en el bar de la esquina, ha sido importada de los países anglosajones donde no es nada extraño ver pubs y tascas llenas de gente tras salir de trabajar. Los hábitos de consumo en España, con horarios cada vez más acordes al resto de Europa (el afterwork se inicia sobre a las 19:00h), se inclinan a esta opción.
Motivación y contacto de forma relajada y distendida
Además de ayudar a paliar la crisis del sector terciario, el afterwork ha sido objeto de análisis por parte de expertos en la conducta humana. Por ejemplo, según el catedrático de psicología Enrique Rojas, también propicia claros beneficios emocionales y laborales en los que lo practican con asiduidad. Su práctica es bienvenida en muchas grandes empresas que creen que fomentar las relaciones entre los compañeros influye positivamente en el rendimiento y motivación del trabajador y permite prolongar el tiempo dedicado a las relaciones laborales de una manera más distendida y relajada. “Es cada vez más común que las empresas inviten a sus empleados a tomar algo después del trabajo con el fin de que interactúen entre ellos” asegura Fernando Peire, director ejecutivo de The Club at the Ivy, uno de los clubes más selectos de Londres especializados en afterwork en el que solo tienen cabida empresarios, artistas, miembros de la realeza y celebridades que forman parte de su selecta lista. “Estos locales son el lugar perfecto para las relaciones sociales y laborales y un momento idóneo para explorar posibilidades de negocio y empleo. En Ivy la gente se sienta en zonas, algunas de bancos corridos, por escrupuloso orden de llegada. De ahí, que las relaciones que se crean sean totalmente fortuitas e inesperadas ofreciendo la posibilidad de interrelacionarse entre sí personas de campos y/o profesiones diferentes”, resume Peire.