El programa Mentores para Emprendedores Universitarios  de la Cátedra de Cultura Empresarial de la Universitat de València cuenta para esta edición con tres nuevos mentores. Con el objetivo de conocerlos un poco más iniciamos una serie de entrevistas a sus máximos responsables.

Hoy comenzamos con Luis Saurat, director general del Instituto Valenciano de Infertilidad (IVI).

¿Qué le lleva a sumarse al programa de Mentoring de la Cátedra de Cultura Empresarial?

Para mí es un honor sumarme a este programa con el que me identifico por sus valores y coinciden en muchos aspectos con los de IVI. Nuestra filosofía se basa en la docencia, investigación y acción social. Tres pilares que se pueden aplicar en mis funciones como mentor de la Cátedra prestando asistencia a los mentorizados en las sesiones de trabajo que realizaremos en relación a aspectos empresariales. Colaborar con la sociedad civil a través de estas Iniciativas es básico para el futuro de la sociedad.

¿Qué piensa que puede aportar como mentor?

Lo primero que quiero decir es que no soy emprendedor, aunque toda mi vida he estado al lado de emprendedores. He podido aprender de ellos y les tengo una profunda admiración. Toda esta experiencia es la que quiero aportar a estos jóvenes, que espero sirva para Ayudar a generar riqueza y puestos de trabajo en el futuro. Los emprendedores son gente distinta porque son inconformistas. Lo más fácil es acomodarse y ellos demuestran una gran valentía y más en el mundo actual donde hay tanta incertidumbre. Sinceramente, creo que la sociedad civil no valora lo suficiente a los emprendedores ni lo que hacen las empresas.

 ¿Es un reto nuevo o antes ya había participado en alguna iniciativa similar?

Es un reto nuevo, tengo experiencia en actividad docente, he participado en muchas ponencias, cursos y seminarios, pero nunca en alguna de este tipo.

¿Qué cree que puede ofrecer el mentoring a un estudiante?

Lo más importante que podemos ofrecerles es la experiencia, no somos profesores al uso. Vamos a compartir cosas que nos han pasado y eso no está en ningún manual.

En su caso personal, ¿dónde reside su auténtico valor?

Como ya he comentado anteriormente, no soy emprendedor pero puedo aportar una visión más objetiva y variada por todas las personas que he conocido a lo largo de mi vida.  Este es el hecho diferencial. Tengo varios ‘libros’ de los que hablar.

¿Y qué puede aportar el estudiante al mentorizado? ¿Le habría gustado tener en sus inicios como empresario un apoyo de este tipo?

Claro que me hubiera gustado. Y los estudiantes por supuesto que te aportan, te sacan de tu ámbito y te encuentras con personas que están empezando, que tienen unas preocupaciones muy distintas a las tuyas y que te transmiten una ilusión y unas ganas que es como si te tomaras una píldora de ilusión. Te rejuvenecen.

Estamos viviendo un boom del emprendimiento, ¿cree que es positivo o puede generar falsas esperanzas al pensarse todo el mundo que puede emprender?

Pregunta complicada. Yo creo que sí que es positivo, porque al final los que crean riqueza y puestos de trabajo y quienes transforman la sociedad y el mundo son las empresas. Y para que haya empresas y empresarios hace falta que antes haya emprendedores. Es importantísimo, si queremos que en España haya menos paro, nos hacen falta más emprendedores y no porque eso sea una forma de encubrir el paro, sino porque es crear oportunidades para que haya más puestos de trabajo. Es verdad que es difícil y no todo el mundo puede emprender, pero sí creo que hacen falta muchos emprendedores en España.

 Por otro lado, ¿considera que es una evolución natural del mercado de trabajo en España tras a la crisis o simplemente es el mismo fenómeno que se ha vivido antes en otros países?

Yo creo sinceramente que es un efecto de las dos cosas. Las personas por naturaleza tendemos a lo fácil, a lo cómodo. Y, ¿qué ocurre? Que si tú puedes elegir entre un trabajo cómodo y bien pagado o lanzarte a emprender, la mayoría de la gente elige lo primero. Pero, es verdad que la gente empieza a ser consciente, también por todo lo que hemos visto en EEUU -Facebook, Apple o Google- que la gente se lanza a emprender y consiguen cambiar el mundo. La sociedad ha visto, por fin, que emprender no es algo de locos.

Muchos de los jóvenes que emprenden hablan más de autoempleo que de emprendimiento y afirman que si pudieran, preferirían trabajar por cuenta ajena con una nómina más estable.  ¿Qué les diría para que no pensaran así?

Les diría que arriesgarse vale la pena porque la satisfacción es mucho mayor. También es verdad que una de las dificultades que tenemos en España es que nos puede el sentimiento de vergüenza y el miedo al fracaso, al que dirán… Y cuando empiezas un proyecto puede que no salga como tú esperas.

Incubadoras, congresos, programas de ayudas económicas, publicaciones especializadas, business angels, programas de formación específicos, numerosas publicaciones, etc. ¿Son suficientes todas estas herramientas o el emprendedor necesita algo más que aún no se ha probado?

Nunca es bastante. Todo lo que se pueda hacer para ayudar a los emprendedores es poco. Es muy importante, repito, es lo que transforma a una sociedad. Valencia en primer lugar, pero después a todo el país. O qué nos queda, ¿vivir de la construcción? Es una posibilidad, pero ya hemos visto que también tiene sus ciclos.